Semifinales a la vista; ¿adversario? Quien sea; preocupa la inactividad
=Tomateros se prepara para la instancia siguiente
= Perder el gran ritmo, un riesgo ineludible
= Arranca el jueves la nueva etapa de “pley offs”
= Culiacán, en camino hacia su corona numero 14
La identidad del rival a enfrentar en la serie de semifinales es irrelevante. De hecho, en ninguna instancia existe adversario fácil; pero a estas alturas los cuatro equipos sobrevivientes presentan tales niveles de equilibrio en sus fuerzas, que nos ofrecerán un espectáculo a todas luces formidable, en esta etapa de la temporada 2023-2024 de la Liga Arco Mexicana del Pacífico.
Abrimos la columna de hoy en esa dirección toda vez que se palpa entre la fanaticada local una especie de morbo y expectación -más allá de la curiosidad- por identificar al contrincante en turno de Tomateros de Culiacán.
A juicio del columnista, sin embargo, si algo debe preocupar es la inactividad obligada del equipo de casa, derivada de la manera tan inesperadamente rápida como eliminó y destronó a Cañeros de los Mochis.
Esta serie concluyó desde el sábado próximo pasado y será hasta el próximo jueves, cuando Tomateros regrese a la actividad, ya en la fase de semifinales.
En los momentos de trabajar estas líneas para ustedes no se conocía aún el nombre del rival; pero lo que si es un hecho es que la escuadra de la nación guinda abrirá fuera de su parque, de tal modo que será hasta el próximo domingo, cuando tengamos acción en el estadio Tomateros.
Y en efecto, si existe un motivo de preocupación para el manager Alfredo Amézaga, su cuerpo técnico y directivos del club, debe ser precisamente el prolongado asueto y no el nombre, ni la jerarquía del rival en turno.
Que se inquieten los otros y no los Tomateros, ante la expectativa de enfrentar a un team que ha protagonizado cinco series finales durante las últimas nueve temporadas y que ha ganado cuatro de ellas en forma incuestionable.
Como usted sabe -porque seguramente lo disfrutó – Culiacán cerró con seis triunfos al hilo el rol oficial y todavía continuó con dos más en el arranque de los “pley offs” para sumar ocho en total.
Perdió el tercer juego de su serie; pero volvió a la senda exitosa con dos victorias más que representaron, de paso, la calificación a semifinales.
Una calificación lucidora, con autoridad, para dejar fuera de competencia, simple y sencillamente, al mismo campeón de la temporada anterior.
Unos Cañeros de los Mochis que se distinguieron, hay que decirlo, por ser uno de los equipos más consistentes de la campaña.
Eso se llama ritmo de juego. Ritmo constante y sonante, que podría perderse tras la inactividad obligada.
Para enfrentar la eventualidad, Tomateros volvió al campo de entrenamientos y así se mantendrá, en forma constante, hasta el miércoles venidero, cuando llegue el momento de viajar a la sede, decidida, tras los últimos resultados de los juegos correspondientes a esta etapa de la postemporada.
Por supuesto que no es lo mismo la práctica que la actividad oficial; pero Tomateros deberá tener el empaque suficiente como para solventar la situación. Un equipo de esta jerarquía cuenta con la capacidad suficiente como para solventar estos retos y algunos más.
Así será.
Por cierto.
Naranjeros de Hermosillo se encuentra en una situación similar a la de Tomateros de Culiacán.
También superó en cinco juegos a los Mayos de Navojoa y ahora está en espera del rival a quien recibirán el jueves venidero en el estadio “Fernando Valenzuela” de la ciudad capital del vecino estado de Sonora.
Naranjeros fue el segundo mejor equipo del calendario regular, con marca de 37 victorias y 31 derrotas, por debajo del 39-19 de los Algodoneros de Guasave, que representó para los ahijados del presidente Andrés Manuel López Obrador, el primer lugar en la tabla general.
Los Mayos, en cambio, fueron los peores. Últimos en el standing global. La calificación obedeció al sistema de puntitos y a esas cosas extrañas del sistema de competencias.
Con todo y eso, Navojoa, que únicamente ganó siete juegos a lo largo de la segunda vuelta – y perdió 26, en contraste – le dio una cerrada pelea a los Naranjeros, lo que ratifica la hipótesis del enemigo pequeño en el beisbol.
Incluso, los Mayos rescataron una victoria del estadio “Fernando Valenzuela” y en su parque ofrecieron una tórrida resistencia superada, a final de cuentas, por la inobjetable calidad del plantel de Hermosillo.
Y ahí están ahora, igual que Tomateros, en espera de su rival en semifinales, también con la misma mentalidad:
El que sea. “Le podemos ganar a cualquiera; cualquiera nos puede ganar…”
En fin.
Y bien.
Evidentemente, en esta postemporada Tomateros de Culiacán es otro equipo. Diametralmente diferente al observado a lo largo de la segunda vuelta del calendario regular. Los guindas están ahora “en modo play offs”, como solemos decir.
Y eso de que es otro equipo no es en teoría. Es en el sentido literal de la expresión.
En efecto, tras las lamentables bajas de Mallex Smith, Sebastián Elizalde y Jesús Fabela, por lesiones y la caída en los niveles de juego de Edgar Arredondo y Aldo Montes, directiva y cuerpo técnico del club se vieron obligados a tomar decisiones de inmediato al interior de su cuarto de guerra.
Fue así que se contrataron, de última hora, a los venezolanos Herlis Rodríguez y Rommer Cuadrado y que se acordó tomar otro pitcher de relevo como refuerzo para la primera serie de “play offs”.
De los dos bolivarianos, Herlis Rodriguez resultó un tiro con su .429 de porcentaje y su jonrón del cuarto juego, para sembrar a los Cañeros de los Mochis en el empastado del estadio Tomateros.
Cuadrado, en cambio, solo batea para .200; pero sus cartas de presentación avalan que puede hacer algo mucho más que eso.
El refuerzo fue Miguel Aguilar, para fortalecer un bull pen que ya de por si es de los mejores de la Liga: Roel Ramírez, Sam Bordner y Spencer Bievens, sin menospreciar a David Gutiérrez, Amilcar Gaxiola y algunos otros jóvenes que andan por ahí.
En paralelo a estos eventos, otra buena noticia: Sebastián Elizalde y Jesús Fabela están de nuevo en la lista de activos.
Quizás no al cien; pero si prestos para una eventualidad.
Y bueno, imposible omitir el nivel de la línea de abridores, con José Luis Bravo (1-0 y 0. 00 en carreras limpias admitidas); Víctor Castañeda (0-0 y 0. 00); Manny Bañuelos (0-0 y 2. 45) y Manny Barreda (1-0 y 3. 38) Sí, es otro equipo en efecto.
Como para ilusionarnos con el 14.
Se vale.