Nancy Pelosi, la política adscrita al Partido Demócrata y la única mujer estadounidense que ha presidido la cámara de representantes de los Estados Unidos (de hecho la lideró dos veces 2007/2011 y 2019/2023) en pleno fragor de la batalla política por someter a un impeachment (juicio político/ proceso de destitución) al ex presidente Donald Trump, fue objeto de una sistemática campaña negra confeccionada y ejecutada desde las mazmorras digitales del Partido Republicano, a través de la utilización de lo que se denomina Deep Fake o “falsedades profundas”, consistente en archivos de video, imagen o voz manipulados mediante un software de inteligencia artificial de modo que parezcan originales, auténticos y reales.
Los deepfakes utilizan el aprendizaje de la inteligencia artificial, por lo que estos archivos consiguen engañarnos fácilmente.
Los Deepfakes se usan para inducir al error a las personas receptoras, por lo que suponen una gran amenaza para la sociedad actual, pudiendo facilitar la desinformación y que la ciudadanía pase a desconfiar de cualquier fuente de información (lisaintitute.com).
En el caso de la líder demócrata, sus enemigos políticos manipularon un audio video, en donde manipularon su voz y sus gestos para hacerla parecer como si estuviera pasada de copas, arrastrando la lengua al hablar, cuando la señora Pelosi es abstemia.
El video se colgó en Facebook y tuvo 84 millones de reproducciones según el libro “Manipulados: La batalla de Facebook por la dominación mundial” de Cecilia Kang y Sheera Krenkel, a mi juicio un texto imperdible del por qué deben de cancelar sus cuentas de FB, pero sobretodo la dilución del gigante tecnológico de las redes sociales.
Sin embargo, por más esfuerzos que hizo la política demócrata por que se borrara el video, Mark Zuckerberg, el consejero delegado de FB, se negó a hacerlo.
A pesar de ello, la reputación de la señora Pelosi, de 83 años, permanece intacta.
Desde luego que para ello tuvo que recurrir a una contracampaña intensa en redes y en medios analógicos de reparación de daños, bajo la sencilla idea de que el que calla otorga.
A todas luces, el video que circula básicamente en WhatsApp (plataforma o red social oscura, no abierta, propiedad de FB) del Secretario de Gobierno de Sinaloa, Enrique Inzunza Cázares, ha sido confeccionado bajo las herramientas impostoras de la inteligencia artificial, en particular utilizando una sencilla aplicación en línea de Face Swap de inteligencia artificial denominada Deepswap, en donde se hacen intercambios de caras, incluyendo cambios de roles en películas, intercambios de género, memes, caras etc.
Esta aplicación que se usa básicamente con fines lúdicos es usada por más de 150 millones de usuarios.
De hecho es burda la impostacion y no se necesita ser un experto digital para notarlo.
Lo que rebela la enorme perversidad de quienes están siendo juzgados por distintos delitos, utilizando los recursos humanos y financieros de la Universidad Autónoma de Sinaloa, para perpetrar ese avieso crimen de lesa personalidad y honor.
Por sus videos los conoceréis. Y aunque usted no lo crea, son absolutamente falsos.
2 comentarios en “Deep Fake, Deep Swap: Campañas negras. ”
Cómo siempre Ricardo muy analíticos y a profundidad los temas que desarrollas y considero que el preámbulo al desarrollar el tema el ejemplo de Nanci Pelosi es bastante ilustrativo de lo que se puede hacer con los deepfake como lo sucedido con Inzunza Cazares. Un artículo que nos ilustra lo bueno o lo malo de lo que se puede hacer de la reputación de una persona.
Muchas gracias por tu comentario!!