Culiacán, Sinaloa, 26 de septiembre 2024.
Hace treinta años, la realidad mundial, el panorama ominoso en su estricta dimensión, fue expuesta en pocas palabras por el entonces presidente cubano, Fidel Castro Ruz, al hablar ante los representantes de las 25 naciones que integraban la Asociación de Estados del Caribe (AEC) y de los nueve países o territorios caribeños.
El mundo está dividido en grandes bloques comerciales, dijo Castro, “se establecen feroces guerras por los mercados y se agranda cada día el abismo entre países ricos con acceso a tecnologías de futuro, y naciones pobres agobiadas por la carga de la deuda y por sus insolubles problemas sociales”.
Muy poco, casi nada, ha cambiado en 30 años y de hecho la inequidad mundial se ha agudizado.
El contexto internacional es profundamente asimétrico y los esquemas de acumulación favorecen a los países ricos en detrimento de los pobres. La lógica de la ganancia, a ultranza, condiciona los alcances benéficos del intercambio y la brecha se agranda.
CONTRA LA INEQUIDAD
La opresión se matiza y la explotación se maquilla pero, a fin de cuentas, no logran ocultar su verdadero rostro.
Lo que sucede en el ámbito global se reproduce al interior de las naciones, y al revés, sin solución de continuidad.
Los países subdesarrollados, en vías de desarrollo, del “tercer mundo”, menos industrializados o como se les quiera llamar, pero que comparten el común denominador del atraso, tienen impedimentos de enorme peso para participar en los circuitos mundiales con mínimas o ausentes condiciones de equidad.
El problema de fondo es político y económico.
Por lo mismo, las indefiniciones y la diplomacia pusilánime, como históricamente venía siendo la mexicana y es la de varios países de Latinoamérica, no hacen sino contribuir a disfrazar la injusticia mundial.
Ahora, cuando México se defiende de los embates del capital trasnacional, de los colonialistas europeos y norteamericanos que siguen haciendo de las suyas, los vende patrias se escandalizan.
Pero no hay de otra, reiteremos:
Confrontación o sometimiento y prepararse para enarbolar la soberanía, porque las injerencias, el intervencionismo y la intención de seguir abusando, seguirán sin sombra de duda.
LA TRAMPA CIBERNETICA
Tiene rato que gobiernos y empresas que se las dan de iniciativas vienen a ser clientes cautivos, por no decir presas, de las grandes corporaciones tecnológicas y, ni tan de paso, lesionan el interés general de los pueblos.
Las innovaciones tecnológicas, hoy, por hoy, no son más que negocios, de común leoninos, que sirven para el enriquecimiento criminal de patanes como Elon Musk.
Y en esa lógica se inscribe la excesiva, en muchos aspectos innecesaria Internetización y bancarización que padecemos, prácticamente en todo el mundo, pero de manera acentuada en México.
¿NUEVOS ACTORES?
En el mediano plazo en México se producirá un reacomodo de las fuerzas políticas, cuyo impacto central tendrá lugar dentro de unos años, particularmente en las elecciones federales del 2030, lo que no quita que sus referentes inicien en el corto plazo.
La hipótesis tiene fundamento:
Un nuevo partido, de ubicación francamente derechista, captaría las fuerzas emergentes de las asociaciones civiles (aunque la mayoría no pasen del membrete), las defecciones de los partidos tradicionales, y a un sector de la burguesía que integran empresarios medios, clase media alta y empresarios medios.
La base de sustentación del nuevo partido sería, en el discurso, la recuperación de la actoría social, involucrando a la ciudadanía en el seguimiento y constante critica del quehacer gubernamental.
Al principio las organizaciones emergentes se van a deslindar de la opción partidaria, lo que es parte del proceso, pero es claro que la salida natural apuntará hacia la participación política en la disputa por el poder, desde un partido. Al tiempo.
EN EL TINTERO
-“Este mundo es insostenible” ha dicho el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. Desigualdad, impunidad, incertidumbre:
“No podemos seguir así”, agregó. Así es ¿Y?
-Que se enojó el rey de España porque no viene (no lo invitaron) a la toma de posesión de la presidenta Claudia Sheinbaum. Gran berrinche de la anacrónica y parasitaria monarquía española.
-Con la campaña en curso contra el gobernador Rocha, parece que todo se vale, en la plena impunidad, en el abierto libertinaje.
-Por ejemplo, la locutora Uresti (que se cambió de chamba mejor pagada y cínicamente dejó correr el mitote de que era culpa de AMLO) “interpreta”, dice lo que no se dijo, acusa sin prueba alguna y más. Así van.
-¿Por qué sigue el “huachicol”? Porque hay quienes lo compran, “no se hagan los inocentes”, nos escribe José Castro. (cano.1979@live.com).