López Obrador “Truena” contra cacicazgos en universidades públicas
= Respecto al proceso de cambio en la UNAM
= Asegura ser respetuoso de la autonomía
= Viernes, nueva audiencia para Madueña
= Cambios en la estructura del gobierno estatal
A propósito del proceso de sucesión en la rectoría de la Universidad Nacional Autónoma de México, en su mañanera del martes próximo pasado, el presidente Andrés Manuel López Obrador declaró:
-Lo que deseo, de todo corazón, es que haya democracia, justicia y honestidad y desde luego autonomía, pero en su sentido estricto; es decir: sin cacicazgos.
Y agregó:
-Eso sí, los caciques duran hasta que el pueblo quiere. ¿Qué tal? Y bien.
Para acomodar las cosas en su adecuado contexto, permítanos recordarle que el lunes anterior la Junta de Gobierno de la UNAM dio luz verde al proceso para la elección de nuevo rector y ya el lunes 21 de los corrientes se emitirá la convocatoria que marcará la ruta a transitar en cuanto al nombramiento de la persona que conducirá los destinos de la universidad nacional, justamente entre el 2023 y el 2027, en sustitución del rector actual, Enrique Graue.
Dicha convocatoria, por supuesto, clarificará las diferentes fases del proceso de selección, que incluye, por cierto, la recepción de impresiones de parte de la comunidad y hasta de la sociedad en general.
El presidente López Obrador recibió la noticia con agrado e insistió que es un tema que deberán resolver los universitarios; pero “sin cacicazgos de ninguna naturaleza”, en el entendido de que “si están lanzando una convocatoria es porque están apegados al marco legal vigente”, para luego insistir:
-Habrá cacicazgos, solo hasta que el pueblo lo permita. Así de sencillo.
Por cierto.
En el tema específico de la Universidad Autónoma de Sinaloa, su rector, Jesús Madueña Molina y su director de Asuntos Jurídicos, Robespierre Lizárraga comparecerán este viernes ante el juez de control, Adán Alberto Salazar Gastelum, a fin de desahogar la audiencia publica suspendida el 18 de julio próximo pasado, ante la ausencia del abogado general de la UAS, por razones de carácter médico. Robespierre adujo problemas de neumonía.
Por eso se postergó para este viernes 18 y aun cuando no se descarta el intento de un nuevo aplazamiento, todo parece indicar que ahora si comenzará el juicio contra Madueña y Robespierre.
Ambos se presentarán debidamente amparados ante la sala regional de Justicia Penal Acusatoria y Oral y acompañados por centenares de trabajadores de la UAS.
Rector y director de Asuntos Jurídicos deberán responder a imputaciones en torno a su negativa de entregar la información solicitada a personal especializado de la Auditoría Superior del Estado, en torno a los ingresos propios de la UAS, que se aproximan a los 600 millones de pesos por año.
Esto es solo un caso. Para otro, más algunos más que ya están en puerta, el rector Madueña deberá regresar a fines del mes en curso para una nueva audiencia, junto al ex rector Juan Eulogio Guerra Liera y los integrantes del comité de adquisiciones de la UAS, para explicar como se gastaron 18 millones de pesos en compras de tortillas durante el mes de mayo de 2020, justamente cuando iniciaban las grandes restricciones derivadas del ataque de la covid-19.
Ambos eventos volverán a poner sobre la mesa el tema del conflicto entre el Estado y la Universidad Autónoma de Sinaloa, que ubica su punto de partida en la ley de Educación Superior aprobada en su momento por el Congreso del Estado y que crea el marco jurídico apropiado para el diseño de una nueva ley orgánica para nuestra máxima casa de estudios superiores.
Era un tema aparentemente amodorrado por el periodo vacacional; pero ya está aquí de nueva cuenta, listo para resurgir con fuerza inusitada en el curso de las próximas semanas.
¿Alguna relación, a propósito, con las declaraciones del presidente López Obrador? Suya la palabra, amigo lector.
Por otro lado.
Informaciones procedentes de la ciudad de México hablan de un acarreo brutal en un acto de apoyo a la precandidata Claudia Sheinbaum, en un acto político efectuado la tarde del martes próximo pasado, en el parque de “la Bombilla” -ahí donde asesinaron al general Alvaro Obregón – al norte de la capital del país.
Esto ya colmó la paciencia a Marcelo Ebrard, el precandidato que aparentemente marcha en segundo lugar, quien salió a los medios de comunicación para denunciar la existencia de una cargada descomunal en favor de Claudia, la corcholata preferida del presidente López Obrador.
Marcelo invitó a los otros precandidatos a sumarse a su inconformidad, bajo el argumento de que aún queda tiempo para enmendar el camino. La voz de Ebrard fue un grito en el desierto. Si acaso una leve reacción de Ricardo Monreal.
La indignación del ex canciller era manifiesta y de tono subido. Hubo amenazas, incluso, de presentar denuncias concretas, sin importar un crack al interior de la coalición de partidos encabezada por el Movimiento de Regeneración Nacional.
Sin embargo, en las horas siguientes no se registró consecuencia alguna, derivada de las acusaciones de Ebrard. Ni las habrá en el curso de las próximas semanas. El proceso empujado por la Cuarta Transformación -como el del Frente Amplio por México – ya está en el carril de alta velocidad y así seguirá hasta el 06 de septiembre cuando surja el candidato presidencial. Ya lo verá usted.
De otras cosas.
José Luis Zavala, uno de los colaboradores del gobernador Rubén Rocha Moya con mayor presencia en los medios de comunicación, dejó la secretaría de Obras Públicas y asumió una subsecretaría en la jurisdicción de Economía. Lo sustituyó Joaquín Alberto Landeros. El gobernador Rocha lo explicó así:
-Zavala no hizo nada indebido; pero somos un equipo ¿quieren estar en el equipo? ¡Manténganse en el equipo!
¿Otros movimientos? Marco Antonio Sánchez Velázquez fue designado como subsecretario de Ingresos y Miguel López sustituyó a Nahum Corrales, quien sobrevivía en la tesorería, desde la pasada administración de Quirino Ordaz Coppel.
Informados.
A manera de colofón: hasta aquí por hoy. Nos vamos ya. Cuídense mucho y Dios los bendiga. Ahora y siempre.